En verano, ¿sabes cuidar la boca de tu hijo?

Con la llegada del calor y las vacaciones, las costumbres de los más peques al igual que las nuestras, cambian. Es época para pasar más tiempo con la familia y los amigos. Salimos más, picamos fuera de horas, comemos más fuera de casa y algunos aspectos de sus dietas suelen cambiar. Todo esto viene también acompañado por un descuido más frecuente de la higiene bucal.

Las altas temperaturas, una mayor exposición al sol y un aumento en la actividad física, hace que su cuerpo pierda líquidos y tenga que realizar cambios con el fin de mantener una hidratación y concentración de sales adecuada. Un claro síntoma de falta de hidratación es la sequedad bucal. La saliva se hace más densa y por tanto tenemos una pérdida en sus propiedades lubricantes.

Podemos asegurar entonces que el aumento de caries y otras enfermedades periodontales son más latentes en esta época estival.

¿Como podemos ayudar a los más peques a prevenir estos problemas?

  1. Antes de acabar el curso, os recomendamos visitar a vuestro dentista de confianza para que les realice una revisión.
  2. Evitar en la medida de lo posible, las bebidas azucaradas y con gas, así como el consumo de productos azucarados, como los helados, sobre todo entre horas. Las etiquetas “bajo en azúcar” o “sin azúcar añadido” no significan que no lo lleven.
  3. Es muy importante mantener la hidratación con una ingesta regular de agua, y recomendamos el consumo habitual de frutas y verduras.
  4. Cepillado de dientes, bajo la supervisión de un adulto, de al menos 3 veces al día. No olvides utilizar un cepillo y un dentífrico fluorado apropiado a su edad.